Naturaleza, carretera, vistas, relajación, casa a cuestas, caravaning, vacaciones, desconexión… Estas palabras son las que se pueden venir a la mente cuando pensamos en un viaje con la caravana. Disfrutar de los ríos y sus aguas heladas en verano, salir a hacer ángeles de nieve cuando el invierno golpea nuestros cuerpos… Paraísos idílicos que, eso sí, necesitan un control y una organización previos para poder llegar a realizar los viajes con una felicidad total. Y eso es lo que os vamos a contar hoy en nuestro blog de Luxecaravaning ofreciendo los mejores consejos para la conducción de cualquier tipo de autocaravana.
Cuando decidimos poner rumbo en la carretera hacia cualquier otro lugar, sea el que sea, debemos tener claras ciertas cosas. Y, la más importante de ellas, es saber cómo está el automóvil. Neumáticos, presión, carburante, líquido de frenos, las pinzas… Todo debe estar al punto y bien revisado para poder salir con seguridad a la carretera. Pero si hablamos de autocaravanas, el examen debe ser más exhaustivo de lo normal. Y es que, al final, con la autocaravana salimos con la casa a cuestas y eso requiere un control más pormenorizado para estar al cien por cien.
Por ejemplo, en una autocaravana no debemos solo revisar lo relacionado con el automóvil como tal (véase motor, frenos, combustible…). En este caso, antes de arrancar debemos hacer lo que se hace antes de salir de casa. Por muy obvio que parece, es necesario revisar si los electrodomésticos, las bombonas de gas y los armarios están cerrados con seguridad para evitar que, en caso de emergencia, todo se venga abajo. Siguiendo con esto, también es importante evitar que haya botes sueltos por la caravana. Con todo guardado evitamos más de un susto si hubiera un momento de relevancia en la carretera.
Otra de las cosas que pueden parecer (y lo son) obvias pero que no está de más recordar es el tamaño de las autocaravanas. Salir con este tipo de automóviles poco o nada tiene que ver con los coches habituales. La dimensión es mucho más grande y la maniobrabilidad requiere mayor tranquilidad y atención al volante si cabe. El tiempo que se requiere para adaptarse al nuevo vehículo no es demasiado, pero sí es importante y muy recomendable hacer algunos viajes cortos antes de realizar la escapada grande para hacerlo con la mayor tranquilidad. Y siguiendo con este punto podemos hablar ya de la velocidad. Pese a que el tamaño de las autocaravanas es mucho mayor que el de los coches habituales, la acción de conducirlas no difiere demasiado.
Lo que sí se debe tener en cuenta es que el tamaño nos reduce el margen de maniobra a la hora de tomar algunas curvas cerradas o a la hora de tomar decisiones en la carretera ya una vez hemos puesto la primera marcha. De hecho, se debe controlar hasta la distancia de frenado ya que se necesita mayor amplitud para poder realizar la maniobra con total normalidad. Además, los expertos recomiendan llevar una velocidad que no supere los 110 kilómetros por hora. Si tomas estos consejos y los sigues a la perfección, la conducción de la autocaravana será la más segura y podrás disfrutar de tus viajes de la manera más cómoda posible. Así, el destino está más que asegurado.
Con estos consejos, las palabras naturaleza, carretera, vistas, relajación, casa a cuestas, caravaning, vacaciones, desconexión, etc. encontrarán su definición más perfecta. Disfruta de tu viaje y de la seguridad con los consejos de Luxe Caravaning.
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