¿Es tu primer viaje en autocaravana con niños? Lo sabemos… El hecho de estar viajando en un vehículo durante horas, en verano y con niños, no parece la mejor idea para disfrutar de tus vacaciones.
Y por eso, hemos preparado una lista con los consejos más útiles para viajar con los más pequeños de la casa.
Créeme cuando te digo que estas van a ser las mejores vacaciones de tu vida.
Viajar en autocaravana con niños te permite: conocer mejor a tus pequeños, pasar más tiempo de calidad en familia, disponer del tiempo suficiente para disfrutar de largas conversaciones y conectar con la naturaleza.
Además, al final del día son ellos quienes más lo disfrutan, pues conocen a gente y lugares nuevos, experimentan nuevas sensaciones y generan recuerdos que guardarán hasta que sean mayores.
Si quieres vivir unas vacaciones inolvidables en familia, solo tienes que tener en cuenta estos pequeños trucos:
Índice de contenidos
Elige el vehículo más adecuado para tu familia
La idea de viajar en camper puede resultar muy tentadora, pero solo si viajas con un niño muy pequeño o un bebé. Las furgonetas camper, aunque son muy cómodas, también son más pequeñas, no suelen tener habitaciones separadas y tienen muy poco espacio.
Si viajas con uno o dos niños, la mejor opción es una autocaravana perfilada o una caravana. Dentro de estos vehículos encontrarás diferentes estancias, con mucha más comodidad y organización.
Además, las caravanas suelen incluir camas literas, que son ideales y permiten que cada niño disponga de su espacio propio.
Planifica el viaje con tus hijos
La peor parte de viajar por carretera es la espera, que se hace todavía más larga si no sabes dónde vas. Ilusiona a tus hijos y permíteles formar parte de esta aventura, que ellos también organicen el viaje y decidan en qué lugares parar y descansar.
De esta manera, se sentirán protagonistas de la aventura, estarán más motivados y sabrán que la espera para llegar a cada destino valdrá la pena.
Viaja en horas clave
Empezar el día encerrado en un vehículo mientras desbordas energía no es el plan más apetecible, ¿verdad? Esto es algo que les suele ocurrir mucho. Los niños se desesperan y se ponen nerviosos cuando acumulan mucha energía que no pueden liberar.
Una muy buena opción, para evitar la aparición de estas emociones negativas, es organizar las horas de viaje en función de las necesidades de los niños.
Por ejemplo: si despiertas a las 9 de la mañana, aprovecha para hacer todas las actividades de la zona. Después de comer, cuando los más pequeños estén descansando, puedes iniciar la ruta a tu siguiente destino.
Incluye en su maleta sus pasatiempos favoritos
Comics, videojuegos, Netflix, juegos de mesa… Las posibilidades son infinitas si le echas un poco de imaginación y estos elementos se convertirán en tus salvavidas en esos momentos de intranquilidad y desespero.
Al final, aunque los viajes en autocaravana son bastante largos, se hacen muy amenos por las paradas, las pequeñas cabezaditas, por la posibilidad de organizar el viaje como tú quieras y de atender los imprevistos sin ninguna prisa.
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